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Cómo mantener una buena salud hormonal en mujeres

La salud hormonal juega un papel crucial en el bienestar de las mujeres y los desequilibrios hormonales afectan a la salud física y emocional. Sin embargo, mantener un estilo de vida saludable puede ayudar a promover un estado hormonal óptimo.

Los disruptores endocrinos (EDCS) son sustancias químicas externas al organismo capaces de interferir en los procesos regulados por las hormonas. Ello puede desencadenar daños en el sistema reproductor o inmunitario, alteraciones del sistema neurológico o enfermedades metabólicas, entre otras cuestiones. La exposición de los seres humanos a los EDCS ocurre a través de la alimentación, la inhalación (en una ciudad muy contaminada, por ejemplo) o la piel mediante la utilización o el contacto con ciertos productos.

Los cambios fisiológicos que sufren las mujeres a lo largo de su vida, como la menopausia, hacen que sea especialmente importante cuidar este aspecto de su salud. Debido a sus características hormonales o a que cuentan con una mayor presencia de tejido graso, las mujeres suelen ser más vulnerables ante la exposición a contaminantes hormonales.

A continuación, se desarrollan algunas pautas para mantener en plena forma al sistema endocrino femenino:

La importancia de una alimentación equilibrada

La dieta juega un papel fundamental en el mantenimiento de la salud hormonal. Consumir una dieta equilibrada y rica en nutrientes variados es clave. Los nutricionistas recomiendan incluir, entre otras:

  • Proteínas de calidad: Pueden provenir de alimentos como el pollo, el pescado azul, el tofu, las legumbres… que contribuyen a la producción de hormonas en niveles adecuados.
  • Grasas saludables: Incorporar ácidos grasos omega-3 (presentes en pescados grasos, semillas de chía o nueces) y ácidos grasos monoinsaturados (aguacate, aceite de oliva…) puede mejorar la salud hormonal.
  • Consumo abundante de verduras y frutas: Estos alimentos aportan vitaminas, minerales y antioxidantes que favorecen el equilibrio hormonal.

 

Gestión del estrés

Las situaciones estresantes pueden llegar a alterar los niveles de hormonas, especialmente el cortisol. La práctica regular de técnicas como la meditación, el yoga o los ejercicios de respiración pueden ayudar a mantener unos niveles hormonales equilibrados. Asimismo, priorizar el descanso y asegurar un sueño de calidad es esencial para un balance hormonal adecuado. Practicar ejercicio regularmente ayuda a mantener un peso saludable e influye positivamente en los niveles hormonales.

Ciertos productos químicos presentes en cosméticos, productos de limpieza o plásticos pueden actuar como disruptores del sistema endocrino, afectando negativamente al equilibrio hormonal. Optar por productos naturales siempre que sea posible puede reducir la exposición a estas sustancias.

Consultas médicas y exámenes regulares

Es importante, en cualquier caso, realizar exámenes médicos regulares y consultas con un ginecólogo o endocrinólogo. Estos profesionales pueden ayudar a identificar cualquier desequilibrio hormonal temprano, lo cual permite abordar los problemas de manera proactiva y recibir el tratamiento adecuado, si fuera necesario.

Recuerda:

  • Mantener una buena salud hormonal en las mujeres requiere un enfoque de 360 grados que involucre a la alimentación, el manejo del estrés, el ejercicio regular y la atención médica.
  • Los disruptores endocrinos son sustancias químicas externas al organismo capaces de interferir en los procesos regulados por las hormonas y que deben prevenirse.
  • Es importante consultar a un profesional médico si se perciben cambios hormonales serios.