Si sientes dolor constante, podrías estar sufriendo fibromialgia

Si sientes dolor constante, podrías estar sufriendo fibromialgia

La fibromialgia provoca un dolor constante y agudo del tejido muscular y óseo, acompañado de una sensación continua de presión en unos puntos específicos, donde el dolor es más identificable e incisivo. Estas áreas suelen conocerse como “puntos dolorosos” y pueden llegar a ser realmente severos.

Los avances en el conocimiento hacen que la fibromialgia sea más conocida, ha permitido que se ponga nombre a lo que antes se atribuía a otras cuestiones o se conocía como «dolor», simplemente.

Entre el 4% y el 6% de la población en España, padece fibromialgia, teniendo especial presencia en el colectivo femenino. Esta enfermedad puede manifestarse muy seriamente y afectar a nuestra calidad de vida hasta puntos inimaginables.

Por tanto, es conveniente conocer los síntomas iniciales para poder paliar las posibles consecuencias. Acudir al profesional sanitario pertinente a tiempo, puede ahorrar unos meses de sufrimiento y un menoscabo de nuestra salud psicológica.

¿Cuáles son sus síntomas?

La fibromialgia se traduce en un dolor intenso en ciertos puntos del cuerpo, llamados “puntos dolorosos”, que deriva en un dolor general del tejido muscular y del tejido óseo, siendo el cuerpo entero en general el que lo acaba acusando.

Lo natural es acudir al médico por sentir dolor general y, sobre todo, dolor que antes no se sentía.

Detectar estos dolores y decidir actuar en las primeras fases de su manifestación es muy importante, puesto que el dolor es una sensación a la que el ser humano acaba acostumbrándose de cierta manera y hace que, con el paso del tiempo, la separación entre lo que se sentía y lo que se siente empiece a difuminarse.

Los síntomas más habituales de la fibromialgia son:

  • Dolor en todo el cuerpo, con ciertas zonas más afectadas
  • Rigidez general, sensación de rigidez en las articulaciones
  • Quemazón en los músculos
  • Cansancio y falta de sueño
  • Ansiedad

Aún no se conocen las causas exactas de la aparición de la enfermedad, de hecho algunas veces el origen es otra enfermedad que por alguna razón afecta al tejido muscular y óseo, provocando una debilidad de los mismos que se traduce en la aparición de dolor crónico.

Otras muchas veces, no se encuentra razón a la aparición de la fibromialgia, entonces se le denomina “fibromialgia primaria”.

 

¿Cómo se trata esta dolencia?

Aún no existe un tratamiento que revierta al completo la enfermedad, pero existen tratamientos que pueden  mitigar sus efectos y calmar, en cierta medida, el dolor de los tejidos, mejorando considerablemente la calidad de vida de los pacientes, así como la calidad del sueño.

A nivel farmacológico los analgésicos, tranquilizantes y antidepresivos son utilizados por los profesionales sanitarios aunque su uso debe estar muy bien regulado.

 

Recuerda:

  • La fibromialgia es una enfermedad muy común y que afecta mayoritariamente a las mujeres
  • Se manifiesta en un dolor muy intenso en ciertos puntos del cuerpo que hace que el dolor se sienta en los tejidos musculares y óseos con una sensación de malestar general
  • Cuando se empiecen a sentir los síntomas se debe acudir al médico para intentar mitigar cuanto antes las consecuencias de esta enfermedad, puesto que aún no hay un tratamiento que la erradique por completo