Pérdida audición súbita

Cómo afrontar la pérdida súbita de audición

El día 29 de septiembre, como cada año, se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad Auditiva, una fecha para visibilizar a las personas con esta dolencia y sus necesidades. Hoy hablamos de la pérdida de audición súbita.

La hipoacusia (pérdida de audición) súbita se presenta como una pérdida rápida e inexplicable de la audición de más de 30 dB en 3 frecuencias consecutivas, ya sea de repente o en el transcurso de unos días y ocurre como consecuencia de que un mal funcionamiento en los órganos sensoriales del oído interno.

Al tratarse de algo repentino, las personas a menudo descubren que han perdido la audición al despertarse.

Sin embargo, otras muchas personas notan un fuerte sonido explosivo o se dan cuenta de la pérdida repentina de audición, que suele afectar a un solo oído.

Muchos de los afectados no acuden al médico, por pensar que se trata algo transitorio o como consecuencia de una alergia, sinusitis, o un tampón de cera en el conducto auditivo.

Sin embargo, la hipoacusia repentina es una emergencia médica y debe consultarse al especialista de forma inmediata para realizar un diagnóstico y tratamiento precoz.

¿Qué causa la hipoacusia súbita?

Son varios los trastornos que afectan al oído, como las infecciones, traumas en la cabeza o incluso enfermedades autoinmunes, que pueden causar la hipoacusia súbita.

Por otro lado, esta afección puede estar ocasionada por la exposición a ciertos medicamentos como los utilizados contra el cáncer o infecciones graves.

Los problemas de circulación de la sangre también pueden ocasionar esta patología, al igual que los trastornos neurológicos o del oído interno.

¿Cómo se diagnostica?

En primer lugar, el médico descartará una obstrucción en el oído por líquido o cera. Si el médico no detecta una causa obvia, el paciente deberá someterse a una audiometría, examen que evalúa la capacidad para escuchar sonidos.

Si el diagnóstico concluye que se trata de una pérdida de audición repentina, el médico ampliará el abanico de pruebas diagnósticas para determinar la causa subyacente.

Estas pruebas van desde un análisis de sangre hasta pruebas de imágenes y pruebas de equilibrio.

 

¿Cómo afrontar la hipoacusia súbita?

La capacidad auditiva es fundamental en nuestro día a día. Los problemas de audición pueden afectar negativamente nuestra vida social, llegando a causar ansiedad y depresión.

Es fundamental en esta afección un diagnóstico precoz que permita iniciar un tratamiento lo antes posible, siendo clave las primeras 72 horas. El tratamiento consiste, principalmente, en corticoterapia, tanto por vía oral, intratimpánica o sistémica.

En el caso que se establezca una pérdida de audición discapacitante, lo primero que tenemos que hacer es aceptar la situación y comenzar a buscar las mejores soluciones, como por ejemplo, iniciar una  rehabilitación auditiva con audífonos.

Estos dispositivos, y su proceso rehabilitador, no curan la pérdida auditiva, pero ayudan a las personas a llevar una vida lo más normal posible. Además, éstos pueden ayudar a superar muchos problemas de comunicación y entendimiento.

 

Recuerda:

  • La hipoacusia súbita es la pérdida de audición de manera rápida e inexplicable.
  • Las infecciones o traumas en la cabeza pueden desencadenar la pérdida de audición.
  • Es clave un diagnóstico precoz y el inicio de tratamiento lo más rápido posible.
  • La capacidad auditiva es fundamental en el día a día y la utilización de audífonos permite llevar una vida normal.