
Contracciones de Braxton Hicks: ¿qué son y cómo aliviarlas?
Las contracciones de Braxton Hicks son tensiones involuntarias del músculo uterino que pueden comenzar en la semana 20 del embarazo, aunque son más frecuentes entre las semanas 28 y 30. Se perciben como un endurecimiento intermitente del abdomen que luego se relaja, sin causar un dolor intenso.
Estas contracciones forman parte del proceso de adaptación del útero al crecimiento del bebé. A diferencia de las contracciones del parto, no son rítmicas ni progresivas, y suelen desaparecer con el movimiento o al cambiar de posición.
Cómo identificar las contracciones de Braxton Hicks
Uno de los aspectos fundamentales para reconocer estas contracciones es su carácter irregular. A diferencia del trabajo de parto, no siguen un patrón definido ni aumentan en intensidad. Generalmente, duran entre 30 segundos y 2 minutos, y no suelen causar dolor, aunque pueden ser incómodas. Por eso las madres primerizas suelen confundirse al experimentarlas por primera vez, especialmente si coinciden con el final del segundo trimestre.
Existen 5 factores que pueden favorecer su aparición:
- Relaciones sexuales: debido a la liberación de oxitocina, una hormona que puede estimular los tejidos uterinos provocando estas contracciones.
- Ejercicio físico: ya sea moderado o por actividades diarias intensas.
- Deshidratación: especialmente en climas cálidos o debido a la baja ingesta de líquidos.
- Vejiga llena: que ejerce presión sobre el útero.
- Estrés o cansancio acumulado.
En cualquier caso, si las contracciones son regulares, dolorosas y se acompañan de pérdida de líquido o sangrado, se debe consultar con el especialista.
Consejos para aliviar las contracciones de Braxton Hicks
Aunque no representan un riesgo para el embarazo, es posible que las contracciones de Braxton Hicks puedan ser molestas para algunas gestantes. Algunos consejos pueden ayudar a reducir su frecuencia e intensidad son:
- Mantener una buena hidratación: beber suficiente agua durante el día ayuda a prevenir la deshidratación, una causa común de contracciones uterinas.
- Cambiar de posición: si se está sentada o acostada, levantarse y caminar puede aliviar la tensión; si se está activa, reposar puede tener el mismo efecto.
- Vaciar la vejiga regularmente: para evitar la presión innecesaria sobre el útero.
- Descansar adecuadamente: procurar tiempos de descanso y evitar esfuerzos innecesarios.
- Practicar técnicas de relajación: como la respiración profunda, la meditación o ejercicios suaves de estiramiento.
Las contracciones de Braxton Hicks son una señal fisiológica normal del embarazo, pero es normal que generen inquietud. Por ello, contar con un seguimiento médico regular y resolver cualquier duda con el especialista es esencial para llevar el embarazo con la mayor tranquilidad.
Recuerda:
- Las contracciones de Braxton Hicks son tensiones uterinas irregulares e indoloras que suelen comenzar entre las semanas 28 y 30 del embarazo.
- Pueden estar provocadas por factores como el ejercicio, las relaciones sexuales, la deshidratación o el estrés.
- Para aliviarlas, se recomienda hidratarse, cambiar de posición, descansar y practicar técnicas de relajación.
